Antiga Estació de Benifallet - Vía Verda

Raquel Blanco Garfia

El sitio es bonito, pero el menú de fin de semana nos pareció carísimo (23€) para lo que era. No había opción de carta, solo menú (ni menú infantil). Los platos eran escasos, el gazpacho y el arroz salados. De segundo pedimos secreto y vacío y la carne no se veía de mucha calidad para el precio. Lo mejor de todo es que pedimos cocacolas con hielo y limon y nos dijeron que el hielo era solo para los cafés (que no entraban en el menú). No entiendo como en un menú de 23€ te pueden decir que no te ponen hielo en la bebida, en plena ola de calor y después de hacer una via verde, que lo que más te apetece es tomarte algo fresquito. Al final conseguimos dos cubitos de hielo (éramos 3). Si volvemos será con bocadillos, y si no nos ponen cubitos solo pediremos el café. Ah! Los postres tampoco valian nada, tarrinas de helado y el brownie más duro que una piedra.

Carlos

Tienen alquiler de bicis para hacer vía verde. 10€ 4h, 15h 8h. Tienen servicio de traslado también a unos 30€ que si lo reservas con antelación te ponen con un grupo y vale menos. Menú vía verde por 14€. Menús brasa y ecológicos por unos 25-29€. Tienen variedad de tapeo siendo una muy buena opción. Bravas 4€. Voll-Damm 1,80, Estrella 1,70€. Un sitio tranquilo, bonito y la comida es casera Cecina espectacular. Buenas verduras y carne a la brasa. Los postres no nos convencieron 2022: cambio de dueños. Simpáticos, pero la calidad de la comida no es la que era. Ensalada de bolsa y bravas congeladas. Una pena

Nohelbia Alvarez

Un buen lugar para desconectar. 1. Habitaciones confortables, limpias con aire acondicionado y wifii ya que no hay señal de teléfono. 2. Personal amable con los huéspedes. 3. Ambiente acogedor y familiar 4. A pocos minutos del pueblo 5. Ofrecen servicios para pasear en bici, en el pueblo puedes hacer kayak, o ir al parque de aventura. Buen sitio para descansar.

Daniel Pérez

Viajamos en familia en el mes de agosto para hacer la vida verde en bicicleta y todo muy cómodo. La habitación sin demasiados lujos, al fin y al cabo es un albergue, pero a nivel de servicios muy bien, un desayuno self-service muy completo que se agradece tener a mano nada más levantarte con niños pequeños, y un muy buen trato por parte del personal, especialmente de Romina. Se agradece también poder dejar el coche en la misma puerta del hostal. No hay cobertura móvil pero bien cubierto el servicio con una red wifi de calidad.